Y al fin aterricé en la isla de Borneo; en su parte malasia, en la capital del estado de Sabah, Kota Kinabalu. Muchos viajeros que ya habían pasado por la tercera mayor isla del Planeta (dejando a Australia en la categoría de Isla Continente) me habían asegurado mucha belleza natural, orangutanes en cautividad y diversión subacuática. No me quise ilusionar con tantas expectativas y me deje llevar por la experiencia que yo iba a vivir. Abrí bien los ojos y los oídos para absorber todo lo bueno y lo malo de este nuevo destino.
KK, como se conoce a la capital de Sabah, me transmitió buenas energías tan solo llegar. Sí, soy de esas que cree en la espiritualidad de las cosas y blabla… Aquel día debí de afrontarlo con ganas y todo lo que se me puso por delante hasta llegar al nuevo hostal lo recibí con una sonrisa. En ese hostal conocí a Sorcha, la que iba a ser mi compañera de viaje durante los próximos 20 días más o menos. Una irlandesa con una sonrisa incansable. Dos días los dedicamos a pasear por la ciudad, visitar sus mercados, maravillarnos con nuevas puestas de sol des de una nueva perspectiva y trazar una ruta por Sabah.

Ruta que seguimos por Sabah. Fuente: http://www.worldatlaspedia.com
Al día siguiente de una cena yankee (a nuestro pesar…) y un paseo con unos couchsurfers de Kota Kinabalu pusimos rumbo a Sandakan. La ciudad más cercana al centro de rehabilitación para orangutanes de Sepilok. Un centro dedicado a la protección de los orangutanes desde 1964. El lugar se dedica a acoger orangutanes desplazados, huérfanos o heridos e introducirlos en un hábitat salvaje. Muchos de los orangutanes huérfanos han experimentado con éxito un proceso de rehabilitación y han sido puestos en libertad dentro del bosque Kabili-Sepilok de 4.294 hectáreas.
Para entrar al centro primero hay que pasar por taquilla (precio por adulto malasio: 5 RM o 1,1€, adulto extranjero: 30 RM o 6,6€) y seguidamente se accede por un camino de madera hasta la plataforma donde tiene lugar el show turístico de alimentación a los orangutanes, cada día a las 10.00 y a las 15.00 horas. Está bien poder ver a los orangutanes en su hábitat más o menos propio, pero la organización de los shows puede afectar a los animales. Cada día, dos veces al día se aglutinan decenas de personas, algunas de ellas poco concienciadas con la fauna que habita y con comportamientos que asustan a los animales. Sería bueno controlar las entradas con el fin de no impactar en el día a día de los señores y señoras del bosque. Es así como se les conoce popularmente, los orangutanes son una de las especies más grandes de simios, se distinguen de los monos por su cerebro más grande, su inteligencia y el hecho de no tener cola.
Los orangutanes viven solamente en las islas de Borneo y Sumatra. Son declarados una especie en extinción ya que su hábitat sigue encogiéndose a causa del crecimiento de las plantaciones de aceite de palma. Es un animal considerado como especie paraguas, ya que ellos son responsables de crear un entorno adecuado a otras cientos de especies que forman los bosques biodiversos del sudeste asiático. Por ejemplo, sus balanceos de árbol en árbol ayudan a propagar las semillas de los árboles, de hecho algunos árboles solo pueden germinar cuando sus semillas han pasado por los intestinos de estos primates.
Borneo, en concreto Sabah estaba todavía por descubrir en este momento del viaje. Nuestra siguiente parada sería el río Kinabatangan, un lugar donde habitan otras muchas especies de flora y fauna como el mono narigudo, macacos o aves como los martines pescadores, las garzas o los calaos rinoceronte, muy difíciles de retratar.
Nuestra última huella en Sabah la íbamos a marcar en Semporna, el puerto de salida para llegar hasta Mabul y Sipadan, situadas en el mar de Célebes. Mabul es de alguna manera la isla residencial o el campo base para explorar los fondos marinos de Sipadan. Aunque también es un lugar maravilloso para bucear y cautivarse por infinidad de raros nudibranquios. Con una visibilidad baja es un lugar conocido por el muck diving, buceo en aguas con restos de sedimentos y sustratos, algo que impide la buena visibilidad.
Pero es Sipadan la que se sitúa, en muchos rankings, entre los 10 mejores lugares del mundo para bucear. Bajo las 12 hectáreas que ocupa la isla, el mar acoge especies tales como barracudas, palometas, miles de lucios plateados, enormes peces loro, tortugas marinas, mantas raya, rayas águilas, atunes, tiburones martillo, tiburones ballena y otras 3000 especies submarinas.
Para preservar este espacio marino y mantenerlo menos contaminado, a finales de 2004, todos los centros turísticos de Sipadan fueron cerrados y trasladados a la isla de Mabul. Además desde el 1 de Abril de 2008, el sistema de permisos del parque de Sabah permite solamente 120 buceadores por día. Este documental de RTVE es una gran ventana a las aguas del mar de Célebes.
http://www.rtve.es/alacarta/videos/bubbles/bubbles-mabul-sipadan/1756256/
Después de los casi 13 días que recorrí Borneo ahora puedo decir que Borneo me suena a naturaleza, mucha en peligro, orangutanes, pájaros, monos, peces, tortugas, amabilidad, sonrisas…